Antônio Furlan nació el 19 de mayo de 1931, en Tatuí, hijo de Gabriel Furlan y Maria Amália. Casado con doña Beatriz Dias Furlan, con quien vivió durante 62 años, tuvo el privilegio de tener cinco hijos: Rubens Furlan, Celso Furlan, Antônio Furlan Filho, Cleide Furlan y Sueli Furlan.
Se mudó a Barueri/SP en 1966, cuando fue transferido por la Policía Militar del Estado de São Paulo al 14º Batallón de la Policía Militar Metropolitana, corporación a la que sirvió por más de 20 años hasta su retiro efectivo.
Antônio Furlan fue un ejemplo de profesional competente, honesto, excelente servidor público que dedicó su vida al servicio de la comunidad en la que trabajaba. Siguió de cerca y colaboró eficazmente con el desarrollo de su barrio y de la ciudad de Barueri que tanto amaba.

 

Ciudadano intachable, fiel siervo de Dios, cooperador de la Iglesia Congregación Cristiana en Brasil donde siempre testificó su fe a lo largo de su vida, dejando huellas que jamás serán borradas.
Amaba y servía sin reservas, tenía una forma especial de cuidar de todo y de todos. Sus hijos fueron educados en los preceptos de la moral, el amor, la solidaridad y la dignidad. Con su ejemplo de vida, se convirtió en un reflejo para su familia y para quienes lo admiraban, dejando un legado de vida a seguir.

 

Aun debilitado por graves problemas de salud, nunca dejó de cumplir con sus deberes de hombre de fe, padre de familia y fiel cumplidor de sus actividades militares. Lamentablemente, falleció el 13 de febrero de 2013, dejando atrás a sus hijos, esposa, 14 nietos, 3 bisnietos y muchos amigos y admiradores. Además de su nombre en la escuela técnica Etec Antônio Furlan.